Es una técnica de fisioterapia invasiva que consiste en introducir una corriente galvánica a través de una aguja de punción seca que produce en el tejido musculoesquelético un efecto analgésico local, produciendo un proceso inflamatorio local que permite la reparación del tejido afectado. Para asegurarnos del éxito de la técnica, además de por su seguridad, esta técnica se guía siempre con ecografía. Esta técnica también es conocida como técnica EPI® (Electrolisis Percutánea Intratisular).
En nuestro centro RecuperateBien de Madrid estamos formados en electrolisis percutánea o EPI. Esta puede utilizarse como tratamiento o combinada con otros procedimientos para asegurar un mejor resultado, como el alto voltaje, las microcorrientes, o neuromodulación con corrientes tipo TENS; un tratamiento local en el lugar de la lesión (se aplica de forma directa sobre el tejido alterado y/o degenerado), que debe realizarse de forma ecoguiada (utilizando como guía la ecografía).